En el relato de una lucha por la vida, se entreteje la historia de un valiente niño cubano en su camino hacia la recuperación tras un terrible accidente con un arpón. Las emociones fluyen mientras se revelan los detalles de este impactante incidente y la valentía que ha mostrado el joven protagonista.
Henry Cristian Zamora Cardoso, un niño cuya fortaleza inspira, comparte cómo un día de febrero todo cambió. Con el corazón en la mano, relata cómo, el 29 de febrero, decidió capturar un momento especial colocando un arpón que él mismo había construido en un poste de luz. Sin embargo, el destino jugó una trágica carta y el artefacto se disparó de manera accidental.
Los minutos se convierten en horas mientras un equipo médico multidisciplinario se embarca en una carrera contra el tiempo en el Hospital Pediátrico Provincial de Camagüey Dr. Eduardo Agramonte Piña. Cuatro horas y 15 minutos de incertidumbre, esperanza y dedicación, culminan con la exitosa extracción del arpón que se había incrustado en el abdomen del joven de 13 años.
Pero más allá de la fría estadística, late un corazón lleno de gratitud y amor. En una publicación en Facebook, la institución hospitalaria comparte el sentimiento de todo un equipo: “Horas de trabajo y dedicación, acompañadas de un gran amor. Seguir su progreso en la unidad de cuidados intensivos y verlo recuperarse es nuestra mayor recompensa”. En estas palabras, se refleja el vínculo especial entre el personal médico y un paciente que, contra viento y marea, se aferra a la vida.